ESTA ES LA NOTICIA PUBLICADA HOY EN EL PAÍS
¿Qué haces aquí, cariño?
Un hombre visita un prostíbulo en Polonia y se encuentra a su esposa entre las empleadas
REUTERS - Varsovia - 11/01/2008
Un hombre polaco ha recibido la sorpresa de su vida al visitar un prostíbulo y encontrar allí a su esposa como una más entre las empleadas del establecimiento.
Según informa el diario polaco Super Express, pasado el primer sobresalto, la mujer confesó que trabajaba allí para ganar un dinero extra, y no en la tienda de un pueblo cercano como pensaba el marido. "Pensé que estaba soñando", ha declarado el hombre tras descubrir la verdadera ocupación de su esposa.
La pareja, casada durante 14 años, se encuentra ahora en proceso de divorcio.
Una mujer se prostituye en secreto para aportar ingresos a su familia y se encuentra a su marido entre los clientes
Una mujer (polaca y casada) que acudía normalmente a un prostíbulo para obtener unos ingresos extra, se encontró con su esposo como uno más de los clientes del establecimiento.
Según informa el diario polaco Super Express, la mujer había ocultado esta ocupación al marido (aunque no la necesidad de fondos familiares). La versión "oficial" era la de que laboraba en la tienda de un pueblo cercano.
El ha declarado: "Pensé que estaba soñando". Ella no ha dicho ni mu ante el que su marido durante 14 años resultase aficionado a pagar por sexo con otras mientras ella se prostituía para aportar un dinerillo extra a la familia (o si se extrañó o dijo mú no lo sabemos porque nada dice el diario polaco de ella. Vamos que lo que la señora tenga que explicar u opinar al respecto parece que no es noticia).
¿É o no É? Pues no lo sé, pero podría ser... No lo sabemos porque a ningún periodista le ha parecido interesante preguntar a la dama.
PD: NÓTESE QUE EL TELETIPO ORIGINAL DICE QUE EL SEÑOR POLACO VISITA EL PROSTÍBULO... a lo mejor era la criatura un inspector de sanidad o un sociólogo en pleno trabajo de campo y Mariquilla tratándole de prostibulero...
2 comentarios:
Buenísimo, mariquilla! Me parto. Lo que hubiese dado por fotografiar ese momento 'caras'. Jajajaja! El caso es que se demuestra, una vez más, lo que todos sospechamos y ninguno terminamos de aceptar: nadie conoce a nadie.
Un abrazo
Yo me quedo con la segunda versión; si la pobre mujer trabajaba allí no creo que fuese por gusto, teniendo maromo en casa. Y mientras se saca un sueldo para tirar del carro, su marido se lo gasta en vicios que, si fuera mejor tío, tendría en casita...
Publicar un comentario